FACTORES DETERMINANTES EN EL BAÑO DE UN PERRO

La hora del baño puede ser convertirse en un acto rutinario y tranquilo o todo lo contrario. Si tu mascota detesta el baño, se tienen que crear unas rutinas y cuidar ciertos detalles para que se convierta en una tarea cómoda y sencilla, siempre todo adaptado al tipo de raza, carácter y espacio del que disponemos en casa. Y sobre todo, tener paciencia.

CON CUANTA FRECUENCIA HAY QUE BAÑAR AL PERRO

La respuesta es: depende. No hay una pauta fija que determine cuándo hay que bañar al perro. Todo depende:

Estilo de vida: No tiene la misma actividad un perro que vive dentro de casa en un espacio urbano que uno que vive en el campo y pasa muchas horas al aire libre.

Tipo de pelo o raza: No necesitan la misma frecuencia los perros de pelo corto que los de pelo largo. Lo mismo ocurre con la piel, por eso, es necesario usar champús específicos para el tipo de piel y pelo.

Problemas de piel: Si el animal tiene problemas dermatológicos, consulta con el veterinario sobre cuáles son los productos más adecuados para bañar a tu perro.

COMO BAÑAR A TU PERRO

Utiliza agua templada, entre 38 y 39 grados.

Cuando el pelo esté mojado, aplica y distribuye todo el champú y frota suavemente por todo el cuerpo.

Evita que entre agua en los ojos y los oídos para evitar posibles infecciones.

Una vez enjabonado, aclara con abundante agua.

Cuando vayas a secar a tu perro, hazlo primero con una toalla, cepilla el pelo y utiliza un secador de aire templado.

No olvidar que la mejor estrategia para que tu perro se acostumbre a la hora del baño es la de acostumbrarlo desde pequeño.